UNA SEDUCCIÓN MISTERIOSA
P.V.P.: 15,90 €
Javier Aguirreamalloa
Ensayo sobre celibato, matrimonio y vocación.
La vocación de todos los hombres es ser hijos de Dios en el Hijo, relación que alcanzamos mediante una alianza nueva y eterna. Para la mayoría de las personas, esa vocación universal se concreta en el matrimonio, camino y anticipo de ese éxtasis, de ese darse y encontrarse, de esa unidad en la multiplicidad que es la vida misma de la Trinidad, y que es lo que anhelamos sin saberlo. Para otros, su vocación al celibato supone saltarse el matrimonio terrenal, y vivir, aquí y ahora, el matrimonio celestial.
Decimos que Dios no tiene pasiones en sentido pasivo, y tenemos razón. No es movido, dirigido o condicionado por pasiones, como nosotros. No se puede enamorar por la misma razón que el mar no se puede mojar o un volcán no se puede calentar; porque Él mismo es amor. Pero ese volcán de amor —el amor que mueve el sol y las estrellas, el amor que se hizo hombre, el amor que murió por nosotros— es más apasionado y real que nuestros amores temporales; es el único capaz de llenar el corazón de una persona casada, a través del amor de su cónyuge; es el único capaz de llenar el corazón de un célibe.
Partiendo de dos concepciones poco exploradas de presencia y libertad, el autor analiza la relación entre el matrimonio y el celibato (en especial el celibato de los laicos), así como el discernimiento para elegir entre un camino y otro (en realidad, entre cualquier camino vocacional). Las conclusiones sorprenderán al lector, algo lógico tratándose de una seducción misteriosa.
Idioma Castellano
Páginas 144
Dimensiones 13,5 x 21,5 cm
Edición Rústica con solapas
Tema VOCACIONES
Editorial PALABRA